Notas de cata
Este vino bien envejecido ofrece un perfil de sabor en capas. La madera picante introduce la experiencia, luego se despliega con toques de hinojo, frutas secas, canela, tabaco, y termina con un delicado toque de ciruela y chocolate oscuro.
Antecedentes
Fundada en 1852, Marqués de Murrieta no es solo una bodega, es una piedra angular de la historia de Rioja. Don Luciano Murrieta el padre fundador, no solo fue pionero en los vinos de Rioja, sino que también los envió por todo el mundo, convirtiéndolos en un éxito en México y Cuba. Hoy, el histórico Castillo Ygay, ahora un museo (desde 2019), sirve como su sede, un testimonio de un legado perdurable. Propiedad de la familia Cebrián-Sagarriga desde 1983, Marqués de Murrieta mezcla perfectamente la tradición con los avances de vanguardia, expandiendo sus viñedos con tecnología moderna. Son una bodega que honra sus raíces mientras abraza el progreso, asegurando que su legado de vinos excepcionales continúe floreciendo.
Proceso de producción
Las uvas de la prestigiosa finca Ygay en Rioja Alta son seleccionadas a mano y comienzan su transformación. Primero, absorben color y sabor en tanques de acero inoxidable durante un breve baile con las pieles. Luego, duermen en barricas de roble americano, algunas completamente nuevas, durante más de un año, adquiriendo toques de especias y vainilla. Finalmente, después de al menos un año de envejecimiento en botella, están listas para impresionar.