Resumen
Descubre el encanto de Finca Helena de Bodegas Abadía San Quirce. Con tonalidades profundas de cereza y taninos sedosos, este vino de Ribera del Duero encarna la excelencia. Fundada en 1998, la bodega se enorgullece de su cuidado meticuloso, desde el legendario viñedo Finca Helena (¡plantado en 1900!) hasta los 15 meses de crianza en barricas de roble francés. Es la esencia de su distinguida tradición vinícola.
Notas de cata
Cereza profunda con un toque de violeta, mora jugosa, especias cálidas y un toque de roble. Tiene una entrada sedosa, estructura elegante, taninos aterciopelados. Es suave y deja un agradable sabor que perdura.
Antecedentes
Bodegas Abadía San Quirce, también conocida como Bodegas Imperiales, fue fundada en 1998 por la familia Antolín y viticultores de Ribera del Duero, priorizando la excelencia. La bodega obtuvo reconocimiento a través de premios nacionales e internacionales, convirtiéndose en un referente en Ribera del Duero. La ubicación en la zona de Gumiel de Izan fue elegida por su potencial vitícola y tradición en el mundo del vino, asegurando el desarrollo perfecto de los viñedos y vinos.
La bodega posee 21 hectáreas y controla más de 80 adicionales. El clima y suelo especial les ayudan a cultivar uvas de alta calidad, principalmente Tinta Fina con una edad promedio de 40-50 años (¡algunas incluso más antiguas!). La icónica Finca Helena proviene de viñas plantadas en 1900, reviviendo tradiciones vinícolas del siglo XIX. La atención cuidadosa a en cada detalle en cada paso se refleja en el producto final.
Proceso de producción
Las condiciones especiales de Ribera del Duero, uvas seleccionadas a mano, cuidadosa selección, fermentación controlada y crianza en barricas de roble francés contribuyen al carácter único de sus vinos. También cuentan con un sistema para garantizar que todo sea auténtico y rastreable.
Las barricas de roble francés facilitan tanto la fermentación alcohólica como la maloláctica. El vino pasa por un proceso de crianza de 15 meses en barricas de alta calidad, seguido de tiempo adicional en botellas para lograr su plena expresión. Es ideal para una conservación prolongada, permitiendo que madure con gracia durante varios años.
Maridaje
Compañeros ideales para este vino incluyen aves de caza, guisos robustos de carne de res, así como platos de osobuco y rabo de buey. Los sabores robustos del vino complementan la riqueza de estos manjares salados, creando una experiencia gastronómica armoniosa.
Temperatura de servicio
La temperatura recomendada de servicio es de 16-18 grados Celsius.