Notas de cata
Este vino ofrece una compleja mezcla de notas terrosas, de sotobosque y minerales junto a ricas frutas negras. Denso y estratificado, tiene una presencia sustancial en el paladar. Aunque su 15,5 % de alcohol es perceptible, sigue siendo equilibrado, con una textura suave y sedosa y un final agradable.
Antecedentes
Imagina una bodega situada en una encrucijada única, donde las brisas frescas del Levante suavizan las áridas llanuras de La Mancha. Aquí, a más de 700 metros sobre el nivel del mar, los suelos de caliza acunan las uvas Garnacha Tintorera y Monastrell. Estas vides ancestrales, algunas desafiando la gravedad a más de 800 metros, susurran batallas históricas y cacerías en medio del terreno agreste. La familia Gils, fusionando tradición con innovación, elabora vinos que estallan con notas frescas de frutas y flores. Su toque magistral saca lo mejor de cada varietal, desde la vitalidad del corazón violeta de la Garnacha Tintorera hasta el poder y la fineza de la Monastrell. En cada sorbo, se percibe su dedicación a la calidad y su triunfo sobre condiciones desafiantes.
Proceso de producción
Alaya, un vino elaborado completamente con uvas Garnacha Tintorera, proviene de una herencia única. Cultivadas en viñas tenaces a una impresionante altitud de 1.000 metros sobre el nivel del mar, las uvas luego envejecen durante 15 meses en barricas nuevas de roble francés y americano, resultando en un vino complejo y sabroso.